El Grupo Mixto del Congreso de los Diputados es una agrupación parlamentaria que reúne a los diputados de partidos políticos que no cumplen los requisitos necesarios para formar su propio grupo parlamentario.
Según el Reglamento del Congreso español, para constituir un grupo parlamentario se necesitan al menos 15 diputados o, alternativamente, 5 diputados que hayan obtenido un mínimo del 5% de los votos válidos en todo el territorio nacional o el 15% en las circunscripciones donde se presentaron. Aquellos diputados cuyos partidos no alcanzan estos umbrales quedan automáticamente integrados en el Grupo Mixto, garantizando así su participación en la actividad parlamentaria y el ejercicio de sus derechos como representantes electos.
El funcionamiento del Grupo Mixto presenta características especiales debido a la heterogeneidad ideológica de sus integrantes
Los diputados del Grupo Mixto comparten recursos administrativos, tiempo de intervención en los debates y turnos de palabra, independientemente de sus diferencias políticas. La portavocía del grupo rota entre las diferentes formaciones mediante acuerdos internos supervisados por la Mesa del Congreso. Esta diversidad puede generar situaciones complejas, ya que pueden convivir en el mismo grupo partidos de extrema derecha con formaciones de izquierda radical, nacionalistas con centralistas, o conservadores con progresistas.
Los derechos y limitaciones del Grupo Mixto están claramente establecidos en el marco reglamentario del Congreso
Sus miembros pueden presentar proposiciones de ley, enmiendas, preguntas al Gobierno y participar en las comisiones parlamentarias, aunque con ciertas restricciones respecto a los grupos constituidos. El tiempo de intervención se reparte proporcionalmente entre sus integrantes, lo que puede resultar en intervenciones más breves que las de otros grupos. En la práctica, esto significa que un diputado del Grupo Mixto dispondrá de menos minutos para defender sus posiciones que un diputado de un grupo parlamentario regular.
La importancia estratégica del Grupo Mixto varía significativamente según la composición del Congreso y la aritmética parlamentaria
En legislaturas con mayorías ajustadas, los votos de los diputados del Grupo Mixto pueden resultar decisivos para la aprobación de leyes, la investidura del presidente del Gobierno o la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado. Este poder de influencia permite a pequeños partidos regionalistas o nacionalistas negociar contrapartidas específicas para sus territorios a cambio de su apoyo parlamentario. Por el contrario, en contextos de mayorías absolutas, su capacidad de influencia se reduce considerablemente, limitándose principalmente a funciones de control y visibilización de demandas territoriales o sectoriales específicas.
